ESPEJOS

Reflectando mis sensaciones
en el espejo de tus sentires,
mi pasión trasciende a tus deseos,
extendiéndose cómo eco,
y cómo evidencia rompe limites
para  transparentar todas  las intenciones,
de tenerte entre mis brazos,
para amarnos sin consciencia,  
sin licencias ni oraciones vanas,
que trasquilen mis caprichos,  
o que cavilen trabas para perder
la trayectoria de la libido,
y seguir andando libremente
en las arenas que se desgranan,
así…
Encontrarnos en las fantasías
que nuestras manos y  labios
van tejiendo haciendo nidos,
disfrutarlas en el goce de lo poseído,
y es en la corteza de la lujuria
dónde la alevosía  esboza
palabras mudas, de ensordecedor
eco dónde nace el  verbo jamás dicho,
conjugándolo, bregándolo,
entre brazos y entre piernas oscilando,  
despojándonos de humedades
que al arden nos combustionen,
siendo el viento del aliento
la caricia despedida que abrace
mil suspiros,  respirarlos, exhalarlos
al ritmo de los gemidos y en un beso
callarlos para escuchar
a los convulsos orgasmos,
que acarician a  nuestros cinco sentidos,  
descifrando cada exaltación,
ya sin dogmas, sin paradigmas
ni cadenas, que se interpongan
o albedríos que desanden lo ya dicho,
lo ya hecho,  lo ya sentido,
y en un comienzo nuevo, continuar
bregando en la libertad unidos.